domingo, 25 de marzo de 2012

Una pequeña reflexión


"[...] Pero, oye... que te tengan que operar no te hace menos que nadie. Ni más débil. Al contrario, has tenido que aguantar el dolor (los dos tipos de dolor) durante mucho tiempo, cosa que la gente normalmente no tiene que hacer, así que, ¿Cómo te puedes considerar débil? "


Quizá lo peor de sufrir una enfermedad es eso. El considerarse débil. "¿Por qué? Todos hemos hecho los mismos trabajos, ¿Por qué, entonces, soy la única que ha tenido que detenerse? ¿Soy más débil?"
Durante mucho tiempo he tenido que ver cómo me limitaba cada vez más, que cada vez podía sujetar el lápiz menos tiempo.
Y eso duele más que cualquier calambre, pinchazo, tirón, entumecimiento. Eso puedo aguantarlo. Puedo aguantar hasta los ataques de rigidez en la mano si eso no me limitara en esto.

Durante mucho tiempo he corregido a todos los que decían que era fuerte. No, lo difícil en estas situaciones es no seguir adelante. La vida sigue y tienes que seguir adelante aunque no quieras.
Me sentía débil por tener esto.

Pero el otro día, en rehabilitación, alguien me dijo eso. "Una operación no te hace menos que nadie".
Creo que el problema es que los que sufrimos una enfermedad pensamos que somos débiles. Porque vemos nuestras limitaciones muy de cerca. Y vemos que a nadie más le pasa. Y pensamos "Soy débil porque tengo "X" limitación"

Pero es cierto, ¿no luchamos para hacer lo mismo que todos con esa limitación? ¿No aguantamos más día a día? ¿No tenemos que aguantar a veces al imbécil de turno (porque no tiene otro nombre) que viene a hacerte alguna broma sin tener ni puñetera idea de lo que te pasa o por qué tienes que recurrir a cosas más simples porque simplemente no puedes llegar más lejos porque tu cuerpo te lo impide?

Me gustaría agradecer a ese hombre las palabras que me dijo.
Pase lo que pase a partir de ahora, no será por ser más débil o valer menos que nadie.
Es una lotería, si te toca, sólo puedes ser más fuerte que nadie.

No hay comentarios:

Publicar un comentario